Por eso, ante Dios ustedes ya no son extranjeros. Al contrario, ahora forman parte de su pueblo y tienen todos los derechos; ahora son de la familia de Dios.
Efesios 2:19 TLA
El Señor está centrado en que nos entendamos cuerpo, está enfocado en que nos entendamos familia, en que nos entendamos importantes para los que están alrededor de nosotros. El Señor está centrado en esta idea de que nos necesitamos para que Él pueda manifestarse en mi vida y en la de los demás.
Acá no existe el trabajo de una persona sola, acá está el trabajo de un cuerpo que se dispone a ser obediente y de miembros que ocupan un lugar en el cuerpo y éste se desarrolla para que la obra en el lugar donde estamos no se detenga.
A veces tenés un contacto superficial con alguien, solamente lo saludás pero no estás familiarizado con su realidad. Esos diálogos nos permiten relacionarnos, no generan un compromiso pero sí una cercanía. Me parece que en estos tiempos tenemos que estar cerca unos de otros, para saber qué le está pasando a mi hermano, no para juzgarlo ni para hacer un diagnóstico de porqué está bien o porqué está mal. Me parece que no es el lugar de la iglesia, nosotros no estamos para decir de quién fue el pecado, si de los padres o del hijo, no estamos puestos como iglesia para marcar cuál fue el error.
Pastor Cristian Centeno
La Palabra dice que es por la obra de Cristo que somos miembros de la familia de Dios, ya no somos ni extraños ni extranjeros. Sin embargo podemos vivir como casi desconocidos sin darnos cuenta de que lo hacemos.
“En un punto de sus viajes Abraham armó un campamento entre dos puntos. Al oeste se encontraba Betel y al este Hai. Betel significa la casa de Dios. Hai significa un montón de piedras […] Como iglesia nos paramos entre dos destinos. ¿Seremos una iglesia Betel o una Hai? Una iglesia Hai es una colección libre de personas que se reúne una o dos veces a la semana para hacer algo espiritual y regresar a casa. Son iglesias orientadas por reuniones cuyas únicas experiencias de Dios son en un ambiente de santuario. Es posible que entre los miembros de la congregación haya poca interacción, en una relación o en el nivel de funcionamiento fuera de las reuniones. En este tipo de iglesias, no es común que haya relaciones de un nivel más profundo dentro de un contexto disciplinado.
Las iglesias Betel son aquellas que reconocen que el Reino de Dios es principalmente relacional, no solo funcional. Se han dado cuenta de que el Señor quiere estar involucrado en nuestras vidas a través de la amistad y la comunidad de otros creyentes. El nuevo Testamento respira compromiso. Cada uno de nosotros es una roca viviente a quien Dios está amoldando para que encaje junto a otros en la casa del Señor. Juntos podemos convertirnos en un lugar para que Dios habite por el Espíritu. El Señor no nos está amoldando en aislamiento entre los unos y los otros. Cómo nos permitimos encajar para estar unidos es la prueba ácida de cuánto puede confiar Dios en nosotros con su poder y su unción. […] Todos necesitamos relaciones responsables en la iglesia… necesitamos relaciones que funcionen correctamente, que acarreen una base fuerte de amistad. Cuando conocemos a las personas con quienes trabajaremos específicamente, debemos crear una amistad sólida que pueda soportar la presión del conflicto, la tensión y la acción”. (Graham Cooke, “Comprendamos a la iglesia”, en Una confrontación divina,)
El Señor desea que podamos reconocer y desarrollar relaciones de iglesia Betel. Pedile en oración que te muestre de qué manera podés contribuir activamente para que esta sea una realidad cada vez más palpable entre nosotros.
Mónica Lemos
