Dejate Enamorar

¡Él es mío y yo soy suya! Él come entre las flores de primavera. Mientras la brisa del día respira y las sombras se van alargando, vuelve, amado mío, como gacela, o cervatillo, por entre montañas bien perfumadas.

Cantares 2: 16-17 PDT

El libro de poemas de Cantares es de un contenido de amor profundo. La descripción intensa del amor de una pareja, y hoy te invito a ser parte de este amor en primera persona.

En este pasaje, la amada describe la belleza del amado en términos poéticos y vívidos. De la misma manera, podemos contemplar la belleza de Cristo, quien es la imagen perfecta de Dios.

En este pasaje, la amada describe la intimidad que comparte con el amado en la casa del vino. Si hoy podés creer que sos parte de esa relación de amor profundo que Cristo te ofrece y dedicar tiempo para expresarle de qué manera recibís su amor y lo amás, seguramente el Santo Espíritu te invada de la exquisita presencia del Amado.

Experimentar la intimidad con Cristo, quien nos ha invitado a entrar en su presencia y a compartir su amor. 

Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.

 Mateo 22: 37 RV
(Énfasis del autor)

“Todo”… un amor sin restricciones, sin medida, sin excusas, pleno y absoluto, así es la demanda divina

Cuando estamos realmente enamorados y entregados experimentamos Su plenitud hasta en tiempos difíciles. Un sentido de propósito y dirección que nos completa, y mayor capacidad para amar y servir a los demás.

La oración y la adoración son una necesidad de intimidad irremplazable que tiene relación directa con nuestra manera de amarlo.

El Rey te dice… “estoy a tu puerta, estoy llamándote, déjame entrar para cenar y compartir cada día”

Una mayor intimidad y conexión con Él. Un aumento en la fe y en la confianza que desata esperanza. Una sensación de paz y tranquilidad en medio de la adversidad

Cuando cantás y elevás tu oración, cuando adorás al Señor no estás cantando o pronunciando solo palabras, llegás al corazón de Dios, porque cuando movés tu corazón Él mueve el suyo. Como si fueras el pródigo, no hay distancia ni lejanía que le impida verte.

Cuando adoramos somos entrelazados al corazón de Dios. Es un misterio, una relación entre lo divino y lo humano

Bendeciré a Jehová en todo tiempo; Su alabanza estará de continuo en mi boca.

Salmo 34: 1 RV
(Énfasis del autor)

Dejate enamorar cada día, buscá en Cristo el renuevo de ese amor absolutamente indescriptible…

Te sugerimos que hoy se escuchen de tu boca palabras de amor para quien más te ama.

No lo dudes, no mires al costado. Es para vos.

 

Ruth O. Herrera