Así hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor, y el que vive en el amor, vive en Dios y Dios en él.
1° Juan 4: 16 DHH
Hace algunas semanas venimos hablando sobre las cartas que escribió Juan, el apóstol, amigo de Jesús.
¿Te acordás que te conté que esas cartas están en la Biblia? ¡Sí! Están ahí para que nosotros podamos aprender de ellas, incluso hoy.
Juan estaba muy emocionado de contarnos lo que él mismo vio, lo que escuchó y lo que vivió estando cerca de Jesús.
Él quería enseñarnos algo muy importante: el verdadero amor, la verdadera vida y la verdadera enseñanza.
¡Sí!… Juan nos habló sobre el verdadero amor.
Ahora, vos quizás pensás: “¿Verdadero amor? ¿Será cuando me gusta una chica o un chico?”. “¡Debe ser cuando juego a la Play o hago lo que más me gusta!”
Pero Juan nos explicó algo distinto. Él dijo que esas cosas que nos gustan pueden cambiar con el tiempo… Pero el verdadero amor no cambia.
¿Sabes qué es el verdadero amor?
Es elegir amar.
Es elegir amar algo o a alguien que es más importante que todo lo demás.
Seguir a Jesús es eso: Es elegir que Jesús sea lo más importante en mi vida.
Eso no significa que no podamos jugar, tener amigos o hacer cosas que nos gustan.
¡Claro que sí!
Pero lo más importante es que Jesús esté primero que todo lo demás.
Cuando elegimos seguir a Jesús, también elegimos amar a los demás como Él nos ama. Eso significa compartir, perdonar, ayudar, decir la verdad, o pensar en el otro antes que en nosotros.