1Oh Señor, has examinado mi corazón y sabes todo acerca de mí. 2 Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto; conoces mis pensamientos, aun cuando me encuentro lejos.
3 Me ves cuando viajo y cuando descanso en casa. Sabes todo lo que hago.
4 Sabes lo que voy a decir incluso antes de que lo diga, Señor.
Sofia y Mia son dos muy buenas amigas ya hace varios años. Desde el primer día que se vieron se llevaron muy bien. Solo basta que una mire a la otra para saber que le pasa.
Sofia sabe todos los gustos de Mia… ¡Hasta de Chico que le gusta! Y cuando falta al cole sabe exactamente por que falto. Así que cuando Mía falta intenta hacer la letra lo mas prolija posible por que sabe que ni bien llega a su casa tiene que pasarle las fotos por WhatsApp de todo lo que hicieron en clase. Igual, aunque no le salga muy prolijo Mia conoce a la perfección la letra de su amiga y siempre sabe que quiso poner.
Un día Sofi hablando con su mamá le contó que bien se conocían entre ellas, y cómo podían saber cuándo una de las dos estaba enojada. Es más, con solo verse la cara se daban cuenta si a alguna de las dos la mamá la había retado antes. ¡Que genial una amistad así pensaba Sofi!
Esa amistad me hizo acordar ¡Cuánto Dios me conoce a mí!
La Biblia nos enseña que Él es mi creador, quien nos diseñó y nos conocía antes de nacer, en la panza de mamá. ¡Y sobre todo nos enseña me Ama! Yo sé que cuando el piensa en vos y en mí pone cara de amor.
La Biblia lo dice así:
Qué preciosos son tus pensamientos acerca de mí, oh Dios. ¡No se pueden enumerar! Ni siquiera puedo contarlos; ¡suman más que los granos de la arena! Y cuando me despierto, ¡todavía estás conmigo!
Estoy segurísima que cuando Dios piensa en vos y en mí pone cara de amor. Me da paz saber que Dios nos conoce tanto y nos ama muuuucho.
Y saber que siempre va a estar cerca me hace re feliz.
Está buenísimo saber que cuando yo le hablo me escucha, aunque a veces las palabras ni salgan de mi boca… porque Dios sabe hasta lo que pienso
¡Dios nos ama y está cerca siempre!