El capitán le contestó: —Señor, no merezco que vayas a mi casa, pero tan sólo da la orden y mi siervo quedará sanado.
Hace mucho tiempo quise conocer más acerca de Jesús, saber cómo es. Entonces alguien me dijo que busque una biblia y leyera, que podía empezar a leer el Libro que escribió uno de los amigos de Jesús que se llamaba Mateo. Así empecé a leer desde que Jesús nació y un montón de cosas que Él hizo y especialmente su manera de vivir.
Esta es parte de una historia re linda de un hombre que era Capitán del Ejército. Cuando Jesús llego a su ciudad, fue a buscarlo y le dijo: “Jesús, mi ayudante está enfermo… por favor te pido que lo cures”. Este soldado sabía a quién pedirle que sanara a su amigo, y como conocía de Jesús no dudo en pedírselo. Él sabía que, si le creía a Jesús, aunque no supiera ni viera como lo hacía, Jesús lo iba a hacer.
El hombre que le daba órdenes a 100 soldados tenía Fe que Jesús podía sanarlo. Y así fue. Se animó a buscar a Jesús por que conocía lo que Jesús podía hacer. Y lo más impresionante es que ni siquiera tuvo que ir hasta la casa del enfermo, sólo dijo que se iba a sanar… y se sanó.
Jesús podía hacerlo y el Centurión lo creyó aun sin verlo.
Es fascinante leer que Jesús ama a todas las personas. Cuando vivió en la tierra Él se detenía a hablar con todos, porque aunque era persona importante, nunca estaba distraído y no caminaba apurado!
Hace poco aprendí que la Fe, es la seguridad de que lo que me parece imposible que pase… ¡sí puede suceder!
Hay cosas que querés vivir y que, aunque no sepas como hacerlas, aunque quizá en ese mismo momento no lo logres… Jesús te ayuda a alcanzarlo. Como cuando querés agarrar algo que está muy alto y ni en puntitas de pie lo ves, pero estás segura, seguro que lo vas a agarrar. ¡Eso es fe!
¡Tener Fe es todo un desafío!
Cuando alguien quería hablar con Jesús lo escucha. Siempre miraba a las personas que nadie veía o a nadie les importaban.
Jesús siempre tenía y siempre tiene tiempo para todos porque Su amor es infinito.
Es por eso que cuando oro, y le pido algo a Jesús, lo hago con Fe, sabiendo de cómo es Jesús, alguien que me super ama y que Él siempre quiere hablar conmigo.
Leer sobre Jesús me ayuda a conocer como es y lo hace Jesús. Eso ayuda a tener Fe a crecer. Y así como el Capitán tuvo Fe y le pidió por su amigo, yo también cuando necesito pedirle algo a Jesús lo hago con Fe, sabiendo que el escucha mis oraciones.