¡Yo también quiero estar!

Así que fueron de prisa y encontraron a María y a José, y al niño que estaba acostado en el pesebre.

Lucas 2: 16

¡¡Guauuu!! Qué lindo es cuando hay un nacimiento en la familia, todos queremos ver al bebé.

Obviamente vamos a clínica, la mamá y el bebé están super cómodos, como corresponde. Pero es súper importante antes de ir a conocerlo tener algunas precauciones, por eso nos bañamos, nos ponemos la mejor ropa bien limpia para poder tómalo en nuestros brazos y brindarle todo nuestro amor, ahora ya sabemos que al llegar nos rociamos alcohol y estamos listos para disfrutar.

La pregunta del millón siempre es: ¿A quién se perece? Todos queremos estar y ser parte de su vida y que aunque sea se parezca en los dedos de los pies… jajaa

Cuando Jesús, aunque era el Hijo de Dios y el Rey más importante del mundo su nacimiento fue el más humilde de la historia.  Te cuento que a donde vayas se habla de Jesús y de su nacimiento y en todos los países celebran su cumpleaños.

¿Te acordás la historia?

María y José llegaron a un establo, como ya sabes; es el lugar donde hay animales y aunque donde nació Jesús estaba limpio, no era muy adecuado para un bebé.

Su mamá María lo envolvió en unas telas como si fueran pañales, José su papá le preparo una cama con paja en el pesebre, que era el cajón donde le ponían la comida a los animalitos, le puso unas sabanas y allí lo acostaron.

¡¿Te imaginás que lindo!? Rodeado por animalitos que se habrán acercado para oler su perfume lindo de bebe. Desde la montaña venían unos pastores felices por la noticia que una multitud de ángeles del cielo les cantaron: “Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los que gozan de su buena voluntad”. Todo pero todo esa noche era diferente, y muy lindo… lleno de ternura.

La verdad yo también hubiera querido estar para adorar a Jesús y ser parte de esa fiesta, con mi mejor ropa y poder abrazarlo, mirar sus ojos y decirle cuanto lo amo.

Ni los bebes más famosos de la historia tuvieron un nacimiento tan impactante… Nunca más los ángeles bajaron del cielo para cantar por un recién nacido. Ningún bebe fue más importante.

Esta navidad seamos parte de la fiesta, no te quedes a fuera, mira que Jesús nació para vos, para mi y para todos aquellos que quieran amarlo. Mira que Jesús nació para regalarnos la vida y para enseñarnos a ser felices.

La Navidad nos hace recordar que Jesús vino al mundo para que conozcamos a Dios cada día y perdonarnos cuando nos equivocamos y hacemos cosas malas. Jesús nos enseña se buenos, y gracias a su venida tenemos paz, gozo, felicidad.

Festeja junto a tu familia el mejor de los nacimientos, abrí imaginariamente la puerta de tu casa y deja entrar al Niño Jesús, regálale una canción, una sonrisa, una oración.

Que esta navidad no sea una más, toma la mano de tu familia y adoren a Jesús. GRACIAS JESÚS POR TU AMOR